Es urgente tomar medidas para enfrentar la crisis humanitaria y migratoria que por estos días hemos visto su punto más violento en el norte del país, pero que también está presente en muchas comunas en Chile.
En lo inmediato, es fundamental asignar recursos para que los gobiernos municipales y regionales enfrenten la crisis, y crear canales de diálogo con las autoridades municipales (y regionales y nacionales) para poder tomar medidas.
Desde la concejalía hemos planteado varias veces la necesidad de acompañar los procesos de regularización de la situación de los inmigrantes. Es necesario facilitar el otorgamiento de visas de reunificación familiar, de refugio y de responsabilidad democrática, instrumentos que ya existen en la legislación chilena actual y que no están siendo ocupados de manera correcta.
Espero que esta situación nos lleve a reflexionar sobre cómo podemos aportar desde nuestros espacios para terminar con la violencia xenófoba que afecta a personas que están en una posición extremadamente vulnerable
